Generación Dead, de Daniel Waters

TÍTULO: Generación Dead

TÍTULO ORIGINAL: Generation Dead

AUTOR: Daniel Waters

EDITORIAL: Molino

PRECIO: 16 E.

ISBN: 978-84-272-001-42

¿SAGA?: Trilogía 'Generación Dead'. Seguido de Beso de Vida y Passing Strange (2010)

Todo transcurre en Oakvale, un pueblo americano donde algunos de los jóvenes que mueren, regresan a la vida de manera inesperada.

Los responsables de educación del país deciden ayudar a estos "discapacitados vitales" para que puedan seguir su educación y conseguir que lleven una "vida" lo más normal posible, aunque una ola de intolerancia y rechazo hacia los zombies va creciendo por momentos...
La protagonista es Phoebe, una chica viva y gótica, que se sentirá fuertamente atraída por un no-muerto muy interesante.

PUNTUACIÓN:

¡Adiós vampiros dulzones y licántropos al más puro estilo oso amoroso!

¡Hola zombies de los guays!

Cuando fui a comprar este libro, tenía en mente pillar Hermosas Criaturas, pero vi la preciosa portada de la Generación y los vivos colores del Dead, y mis manos lo cogieron sin pedirme permiso. ¡Y qué bien hicieron! Porque estos no-muertos son de lo mejorcito que hay hoy día.

Nos encontramos frente una historia de ¿amor a lo Crepúsculo como dice los subtítulos de su portada? Definitivamente, no, porque esto sí que es amor con complejos. Si ya Bella Swan o Elena Gilbert nos sorprendían con un: ''¿Eres un vampiro? Guay, colega. Menudo flipe'', en Generación Dead nos encontramos con algo más natural: miedo y mucho, pero que mucho rechazo.

En los imaginativos y originales EEUU de Daniel Waters, los adolescentes que regresan de entre los muertos están a la orden del día. Y no solo son casos aislados, sino que son cientos de ellos. Pero esto no significa que un chico mortal se encuentre con un zombie y le invite a tomar una cañas, porque, muy lamentablemente, hay un racismo significativo por parte de la mayoría de la población. Y a partir de ahí se desarrolla la historia. Pero estas personas con diferente factor biótico están exentas de todo derecho y no gozan de una ciudadanía digna. Simplemente, so se los considera personas.

Con una pluma ágil, clara y divertida, el autor ha creado una perfecta sociedad muy rica en detalles, partiendo de nuestro mundo actual -es imposible no comparar el racismo de hoy día con el de la novela- y convirtiéndolo en una novela original y tronchante, regalándonos unos personajes muy americanos y unos muertos vivientes que me encantaría tener como amigos.

Engancha desde la primera página, porque el humor negro y directo de Daniel, me hicieron reír a carcajadas en más de una ocasión. La narrativa es muy buena, con todo lujo de detalles, no dejando nada al azar y sí poniendo todo en su lugar y en su justa medida. Los diálogos son geniales, sin rellenos ni innecesarios. Aunque el autor se decanta más por la narración de los hechos, las conversaciones entre los personajes son fantásticas, llenas de humor, sentimiento y personalidad. Y, porque no decirlo, algunos son muy pícaros...

Otro punto a su favor son los capítulos, ni muy cortos ni muy largos, intercalando distintos puntos de vista en tercera persona. Esto es algo que siempre me ha encantado, porque permite conocer mucho más a fondo a los personajes.

Pero sin duda, el trasfondo social en el que se desarrolla Generación Dead, es lo mejor de toda la obra. Sé que soy muy repetitivo, pero me sorprendió el mágnifico trabajo de creación de esos nuevos EEUU.

No podría decirse que es puramente romántica paranormal como nos lo anuncian. Más bien es una sátira del racismo, el rechazo hacia personas diferentes, el miedo a lo desconocido, la falta de apoyo de los peces gordos y, ahora sí, un pizquita de amor del bueno, sin azúcares añadidos. Aún así, nos encontramos con misterios, muchísimas aventuras, unos personajes de toma pan y moja, suspense, acción y una delicada forma de contarlo.

Y nuestros protas... Mmm: chicos guapos, chicas góticas, zombies atractivos que dicen lo piensan en un idioma que todos los adolescentes conocemos -¿sabéis por donde van los tiros?-... Vamos, un surtido de chuches deliciosas. Por un lado tenemos a las Hermanas Raras: Phoebe, la potagonista, y Margi, su mejor amiga. Ambas son góticas, extrañas, guapas y divertidas, aunque Margi logra sacar de quicio en más de una ocasión. A mí me apasiona todo lo relacionado con la cultura gótica, y que Phoebe lo fuese de pies a cabeza, me enamoró.

Después tenemos a Adam, el amigo de las Hermanas Raras, el chico más buenorro del instituto, jugador del equipo de fútbol, el terror de las nenas, pero coladito por Morticia Pantisnegros -o sea sé, Phoebe-. un chico dulce y tierno, que haría lo que fuese por sus amigos, pero... ¿y si tuviese que ayudar al amor de su vida a conquistar el corazón muerto de un zombie? Es aquí donde entra Tommy y su pandilla de de novivos-nomuertos. Él es como el líder de los muertos vivientes, el defensor de sus derechos y un amigo de verdad. ¡Incluso tiene un blog!

Y los secundarios, incuso más encantadores que los principales: Karen, la Miss Universo muerto; Colette, la zombie tímida; Pete, el gilipollas de turno...

Pero, si me ha gustado tanto, ¿por qué un 4/5? La respuesta es sencilla: hubo momentos en los que el ritmo decaía, sobre todo cuando se trataba de narrar un partido de fútbol americano. Queda clarísimo que Daniel es un auténtico fan de este deporte, pero en mi mente inexperta, que le hablen de bases, balones, campos de juegos y derivados, sólo se traduce de una forma: me aburrooooo. Eso y la dichosa manía de llamar a los personajes por su apellido. ¡Si ya de por sí me costaba aprenderme un nombre, no te cuento el apellido! Ah, y el final, ESE final que no me gustó nada...

Si quieres pasar unos momentos inolvidables con una historia original, una sociedad alucinante, unos personajes de lo más mono y un pequeño amor que florece a cada página, no lo dudes y únete a la Generación Dead.

Yo ya soy miembro.

Y a vosotros, ¿qué os pareció? ¿Os gusto o lo odiasteis? ¿Os gustan los zombies y el fútbol americano? ¡Cuenta, cuenta, que te escucho!