Heraldos de la Luz, de Víctor Conde

TÍTULO: Heraldos de la Luz

AUTOR: Víctor Conde (Prólogo de José Antonio Cotrina)

EDITORIAL: Editorial Hidra

PRECIO: 17 E.

ISBN: 978-84-92939-17-6

¿SAGA?: Trilogía ''Los Heraldos''. Seguido de Heraldos de la Oscuridad y (...) (aún sin título)

__SINOPSIS__

Mientras la batalla entre el Cielo y el Infierno llega a su punto culminante, tres jóvenes elegidos viven sin ser conscientes de su auténtico destino. Tanya compite en un concurso de talentos para demostrar que tras su look de Lolita hay un cociente intelectual muy superior a la media. Erik actúa como doble en las escenas más arriesgadas de una película de acción. Y Mauro subsiste como un scene inadaptado.

Una misteriosa joven llegará para advertirles de que corren peligro, y pronto Tanya, Erik y Mauro serán testigos de cómo el choque entre Luz y Oscuridad comienza a cobrarse víctimas de una forma terrible.

¿Qué podrán hacer ellos frente a esta espiral de violencia eterna? 

__PUNTUACIÓN__

__OPINIÓN PERSONAL__

No es un secreto que los ángeles y los demonios me apasionan. Son unas criaturas geniales, perfectas diría yo para una buena novela juvenil, pero no me refiero al típico ángel mega divino, que sólo sabe hablar del Todopoderoso, santo hasta decir basta, sin un ápice de maldad ni picardía, de los que callan por no pecar.  No, nada de eso. A mí me gustan otro tipo de ángeles: los sexies, los bellos por naturaleza, los no-tan-santos, los que pecan, los que caen en la tentación, los que son como cualquier persona. Y esto, queridos diariadores, es lo que nos encontramos en la genial novela de Heraldos de la Luz.

Víctor Conde, con una pluma adictiva, ágil y directa, nos trae un libro fresco, diferente y original, donde tenemos acción, demonios malos malísimos, ángeles un tanto peculiares, adolescentes semi-divinos geniales, decisiones terribles, muertes, traiciones, suspense y miedo. Puedo decir, con total seguridad, que esto SÍ es una novela de seres celestiales molones, con sus guerras, su sangre y sus antagonistas repulsivos.

La historia es muy adictiva, llena de giros inesperados que, en más de una ocasión, te dejarán con la boca abierta. Está muy bien atada, sin ningún cabo suelto ni tramas cogidas por los pelos, para nada es una novela cogida con pinzas. Cada palabra, cada gesto o cada situación es muy importante, y aunque parezca que no tiene relevancia alguna, el autor te sorprenderá utilizándola donde menos esperes. Otra cosa a destacar es la tremenda naturalidad con la Víctor cuenta las cosas, siguiendo todo su propio ritmo, sin alteraciones ilógicas ni demasiado forzadas, dejando claro qué quiere y qué le gusta a cada uno. Los problemas típicos de los adolescentes, como el sexo, la sensación de soledad, la búsqueda de uno mismo, están muy bien argumentados, haciendo que te sientas identificado totalmente con los protagonistas.

Aunque a mucho el tema este religioso en los libros les tire para atrás, sólo os digo que le deis una oportunidad a la novela, porque a pesar de nombrar bastante la naturaleza de los ángeles y de Dios, en ningún momento el autor te inculca unos valores religiosos determinados, sino que lo hace de una forma tan sutil y divertida que piensas que habla del vecino del 4º. ¡Ole, ole y ole! Pero si tuviera que quedarme con una sola cosa, sin duda elegiría esos momentos de las batallas, perfectamente descritos y sádicos, sin censurar ni un ápice de violencia. ¡Un diez en este punto!

Los capítulos son geniales, largitos y llenos de sorpresas, con unos finales que te dejan con ganas de más y más, hasta que te das cuenta de que no puedes continuar. Pero otro cosa es el ritmo. Para mi gusto, es un poco lento al principio, mientras nos vamos adentrando en la historia y conociendo las situaciones, pero una vez están todos los personajes haciendo de las suyas, la historia coge un ritmo vertiginoso hacia arriba.

Tengo que admitir, que uno de los aspectos que le han otorgado el 5 a esta joyita es la nueva visión que se le da a todo lo que conocemos de la religión cristiana, como lo que es en realidad el infierno -que no voy a desvelar para no quitaros la sorpresa-, como es el cielo, la forma que tienen nuestras almas o las clases de demonios, a cada cuál más espectacular y fascinante, porque ¿habéis oído hablar de los demonios del sexo o de los que se transportan a través de la oscuridad y de las sombras? Es, en una palabra, SUBLIME.

¿Y qué decir de los personajes? Son perfectos, con unas personalidades la mar de divertidas y originales.

Tenemos a los tres protagonistas principales: Tanya, la chica Lolita, inteligente y decidida, que sabe lo que quiere y no para hasta conseguirlo. Una de mis favoritas, sin duda. Después está Erik, el que más me gusta, divertido y espontáneo, algo chulito y fastasmón, pero con un corazón enorme. Y Mauro, el que me cae ni bien ni mal, es un scene -un tipo de emo-, tímido, solitario y con un pasado tormentoso. Pero al final le coges cariño y todo.

Y Séfora, el ángel, que adopta el cuerpo de una chica negra -algo que me gustó muchísimo-, bebe cerveza con alcohol y fuma. Vamos, el ángel más peculiar que he visto.

Y para terminar, el final, ESE final que me dejó de piedra, muy abierto y con sorpresa, que me dejó con unas ganas tremendísimas de seguir leyendo. ¡Por favor, Víctor, tráenos ya Heraldos de la Oscuridad!

Sin duda, se ha convertido en una de los imprescindible de mi estantería.

Y a vosotros, ¿Qué os ha parecido? ¿Os gustó o lo odiasteis? ¡Cuenta, cuenta, que los estoy deseando.

MUCHAS GRACIAS A LA EDITORIAL POR ENVIÁRMELO.

__MÁS INFO__

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- Editorial Hidra.