Frío, de Laurie Halse Anderson

TÍTULO: Frío

TÍTULO ORIGINAL: Wintergirls

AUTOR: Laurie Halse Anderson

EDITORIAL: Roca Editorial

PRECIO: 16 E.

ISBN: 978-84-9918-137-0

¿SAGA?: Libro autoconclusivo

_____SINOPSIS_____

No debo comer. No debo comer. No debo comer. No debo comer. No debo comer. No debo comer.

Lia se repite constantemente que no debe comer. En su vida sólo hay sitio para contar las calorías, para hacer ejercicio cuando la han obligado a ingerir una cantidad de alimentos que ella considera excesiva. Siempre. Pero ahora su amiga Cassie, con quién llegó al terrible pacto de convertirse en la más delgada del instituto, ha muerto y la persigue en sus sueños, porque se la quiere llevar con ella, no quiere estar sola al otro lado…

_____PUNTUACIÓN_____

_____OPINIÓN PERSONAL_____

Tremendamente hermosa, deliciosamente magnífica, increíblemente realista, terriblemente arrolladora y simplemente perfecta.  Estos son unos de los muchos adjetivos que le doy a esta novela de Laurie Halse Anderson. 


Los mundos distópicos marcados a fuego con sangre y crueldad se marchan para dar paso a la realidad más absoluta, que si bien sigue dotada de terror, no está desarrollada ni en el siglo XXII ni en otro futuro mucho más lejano. No, esta historia se narra aquí, en nuestra época, contando las pesadillas de Lia, una joven anoréxica que va destruyendo su mundo poco a poco, agotándolo, pero que con la muerte de su amiga Cassie, su vida solo se convierte en un susurro de lo que antes fue.


A decir verdad, desde el principio supe que me gustaría, aunque esta es la primera obrita que cato de este género, pero tantas buenísimas críticas, tantos premios y tanto bombo y platillo pusieron mis expectativas por las nubes. Aun así, tenía la incertidumbre de que me podría decepcionar. Gracias a Dios, naranjas de la China. ¡Me he enamorado de la historia que Laurie nos trae, de las pesadillas de Lia y de la forma tan magistral que tiene para contárnoslas!


La historia -valga la redundancia- se aleja completamente de la literatura juvenil actual. Aquí no hay amor prohibido ni misterios ni intrigas. En este libro se respira odio y mucho miedo a uno mismo. Es una trama que narra la situación de muchas jóvenes hoy día, que con la grácil, musical, hermosa y perfecta pluma de la autora, hacen que Frío se convierta en un imprescindible de todas las estanterías; uno de esos libros que todos deberíamos leer antes de morir. Una obra maestra, vamos.


La manera tan bella con la que está escrito, expresando cada mínimo sufrimiento, pensamiento y deseo de nuestra protagonista, con texto tachado donde se refleja su verdadera humanidad, con flashbacks y con intervenciones esporádicas de lo que le dice su corazón, dotan a la novela de todos los ingredientes necesarios para convertirlo en un inmortal de la literatura realista.


El ritmo es asombroso, sin ni un sólo altibajo, frenético y adictivo, que te mantendrá pegado a las páginas hasta que hayas leído la última frase, que sin duda, es para recordar. Puedes devorarla en un abrir y cerrar de ojos, sin aburrirte ni un instante, porque Lia es atrayente, su historia es atractiva. Quieres seguir leyendo y ver qué la pasa, qué siente. 


Los capítulos son bastante cortitos, se leen en un suspiro, con unos finales que te piden a gritos  que sigas y con unas situaciones duras hasta decir basta. Porque así es Frío, duro y trágico, pero bello y hermoso al mismo tiempo. Un joya. Además, tiene una forma peculiar de aparecer, porque no es el típico Capítulo uno, sino así: [001.00].


Y ahora vayamos al punto fuerte de la novela: los personajes. Un cóctel increíble de personalidades perfectamente definidas -aunque sólo de los los tres personajes principales-, con todos los matices bien formados. Lia, la protagonista, es una criatura destruida por dentro y horrible por fuera, aunque ella cree que lo que hace la lleva a la perfección. A pesar de todo, es fuerte, muy fuerte, y sabe que debe salir de ese pozo negro que es la anorexia, pero no puede, porque ya ha pagado el billete de ida, pero no el de vuelta. Aunque no entendí su afán por matarse, la amé y lloré con ella. 
Cassie, su mejor amiga fallecida, es un personaje -mejor dicho, fantasma- al que odié hasta la saciedad. Sin escrúpulos y egoísta, siempre atormentado a su amiga porque no se atrevía a estar sola al otro lado. Su pasado, todo, lo odié. Aun así, es un buen roll.
Elijah es así como el único soporte de Lia. Algo rarillo, bohemio y con una forma de vestir bastante particular, me encantó el papel que desempeñó. Aunque su acción final no me gustó, acabé comprendiéndola e incluso agradeciéndolo lo que hizo.


Y para terminar, hablaremos del final. A pesar de ser perfecto e irreemplazable por otro, me pareció un poco precipitado. En las últimas páginas todo fue muy rápido y algo irreal. De repente, todo sucede y todo cambia. Es como si Laurie hubiese querido terminar ahí, sin seguir más. Aun así, me encantó.

Un obra sencillamente perfecta que no debería faltar en tu estantería. Un respiro de tanta magia que te sumergirá en los oscuros mundos de Lia, un personaje inolvidable.

LO MEJOR: la pluma de Laurie y la historia de Lia.
LO PEOR: que se haya acabado...

MUCHAS GRACIAS A LA EDITORIAL POR EL ENVÍO

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